El planeta reclama, tiene sed, de agua;la lluvia son emociones derramadas, generosas, que lavan y permiten luego la frescura y la calma. Negamos las tormentas , negamos el amor , negamos el sentir , para no perder el control. Como si de algo sirvieran las arma-duras de protección… Protegernos de que ? De estar vivos? o de estar muertos? porque se adueño de nuestro cuerpo la insensibilidad y el temor. Mueve el ser superior el giro y el espiral de activación, para eliminar la programación. Muchas formas hay que generan la misma re-acción. Mirar alrededor sin miedo,nos permitirá la elección, no importa cual ... Será la que elija nuestro corazón, dejemos a la mente descansar, para que pueda alivianar y recibir nueva información. Y la lluvia mojara de nuevo la tierra en extinción.
UMAI 14-09-09
